Hay DOS cosas que tienes que tener en cuenta al planificar tu aventura en el Camino de Santiago:
UNA: Tú decides lo que puedes y quieres hacer.
DOS: Tú y solo tú lo tienes que hacer, todo lo que encuentres es para ti, aunque después puedes compartirlo, y todo el esfuerzo físico y mental que has de poner es asunto tuyo.
Antes de hacer el plan, tendrás que tener muy claro que quieres ir y prepararte adecuadamente para conseguir el objetivo. Has de seguir unos pasos que más o menos pueden ser los siguientes:
1. Informarte. Este blog y los links que he puesto podrían ser suficientes, pero hoy día la información no es un problema, hay mucha y muy buena.
2. Evaluar bien tus posibilidades. Al hacer el camino NO COMPITES con nada ni con nadie. Si vas a ir con espíritu competitivo es mejor que te quedes en casa.
3. Buscar el mejor momento para poder hacerlo con tranquilidad y sin tener que preocuparte ni ocuparte de nada importante. Lo importante cuando estás en el camino es estar allí al 100%.
4. Preparate física y mentalmente y repasa de nuevo tus posibilidades, de vez en cuando durante tu preparación, para ver si realmente puedes afrontar lo que deseas.
Una vez que avances en tu preparación y hagas la evaluación de tu proyecto:
YA PUEDES HACER UN PLAN TENTATIVO QUE LUEGO CAMBIARAS SOBRE LA MARCHA ¿O NO? EL CAMINO TE LO DIRA.
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